Embarazadas decidirán cuándo tomar su incapacidad
Milenio Diario 39 Tendencias - Mónica García Ramírez

Desde el primero de julio de este año, las mujeres embarazadas afiliadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tendrán la posibilidad de transferir hasta 4 semanas del periodo prenatal al de posparto, informó el titular del instituto, Mikel Arriola, durante el anuncio de las nuevas reglas en incapacidad por maternidad.

Por ley se prevé el derecho de las mujeres trabajadoras embarazadas a tomar un descanso de 12 semanas, que antes se distribuían en seis semanas previas al parto y otras seis a partir del nacimiento de su hijo.

Con esta nueva medida se flexibiliza el esquema de distribución donde se pueden distribuir desde dos semanas (14 días) previas al parto y las otras 10 semanas después de tener a su hijo “con lo que podrán disfrutar hasta 70 días con sus bebés”, destacó Arriola.

“Habíamos escuchado a las mujeres que no necesariamente las semanas previas al parto les ayudaban mucho, sobre todo porque tienen el pendiente de estar en el trabajo, pero el principal pendiente es estar con el niño cuando nazca, entonces la ganancia neta es de 66 por ciento en semanas”, explicó.

El titular del IMSS hizo hincapié en que la transferencia de semanas de incapacidad “no tienen que ser acordadas con el patrón, es un derecho de las mujeres y el patrón tendrá que asumir que se usan el mismo número de semanas pero espaciadas de diferente forma”.

Recordó que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) los beneficios de que la madre pase más tiempo con el niño son que se tiene más tiempo para darle leche materna, que es como la primera vacuna, pues ayuda a desarrollar su sistema inmunológico durante los primeros seis meses de vida.

Además, la lactancia reduce 35 por ciento el riesgo de que en el futuro ese bebé padezca diabetes tipo 2, y baja 13 por ciento la posibilidad de tener obesidad o sobrepeso.

El fincionario destacó que las nuevas medidas beneficiarán a 273 mil mujeres en total, además de que tienen la finalidad de empoderarlas al ser ellas mismas quienes administren su tiempo de incapacidad para estar con su bebé.

OTROS BENEFICIOS

Arriola también anunció dos nuevas reglas más que “rompen con barreras administrativas”. Una de ellas es que solo se expedirá un certificado de incapacidad, mismo que ampara los periodos posnatal y prenatal por 12 semanas (84 días), ya que antes las embarazadas tenían que realizar visitas adicionales.

En el sistema anterior se exigía a las mamás tramitar invariablemente dos tipos de certificados de incapacidad (el prenatal y el pos natal) hasta por 6 semanas, con lo que la asegurada debía ir al IMSS al menos dos veces.

La segunda regla beneficia a quienes deciden atender su embarazo fuera del IMSS, toda vez que solo tendrán que presentarse a una cita dentro de la semana 34 de embarazo (8 meses y medio); con la presentación de un ultrasonido reciente (de antigüedad menor a cinco semanas).

Esta medida beneficiará a alrededor de 75 mil aseguradas al año y liberará aproximadamente 400 mil consultas para el resto de la población derechohabiente.

Con la regla anterior, a quienes decidían atender su embarazo en un hospital privado tenían que ir a la clínica del IMSS desde cuatro hasta siete a veces a fin de que los médicos certificaran su embarazo y pudieran realizar los trámites para expedición de certificados de incapacidad y pago de subsidios.

REACCIONES FAVORABLES

La presidenta del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), Alexandra Haas, felicitó a Mikel Arriola por la implementación de las nuevas reglas para licencia de maternidad, pues los beneficios de la lactancia disminuyen cuando las madres interrumpen este proceso para regresar a sus trabajos.

Haas señaló que en México “es común pensar” en ese periodo fundamental para las madres y padres trabajadores y sus hijos, “como un costo para las empresas y para el gobierno”; y que con esta visión se asume “implícitamente” que el cuidado de niñas y niños es responsabilidad exclusiva de las mujeres.

Debido a esa forma de pensar, abundó Haas, las compañías preferían contratar hombres “porque no se embarazan ni tienen que cuidar niños”, situación por la cual hay un gran número de quejas en el Conapred relacionadas con despidos injustificados o falta de oportunidades laborales por embarazo.

Lorena Cruz, presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, también reconoció este “gran paso del IMSS” en la agenda de equidad de género, pues responde a las necesidades individuales de cada derechohabiente que atraviesa por un embarazo y permite a las mujeres seguir trabajando conforme a sus circunstancias y condiciones. m